Love first

Preparar nuestra boda creo que fue una de las cosas más bonitas que he hecho en mi vida. Veo las fotos, y me las he visto miles de veces, y  me emociono. La verdad es que preparar nuestra boda no fue nada facil, sobre todo al principio. Sabíamos que queríamos una boda pequeña, fuimos unos 70 invitados, en un sitio bucólico pero no demasiado “campestre”. Un lugar mágico que hiciera que nuestros invitados vivieran una experiencia inolvidable. Y al final, acabamos en una preciosa y escondida finca en Mallorca. Una finca con un aire entre toscano y costa azul que nos enamoró.

Despúes tuvimos la suerte de conocer el catering de Andreu Genestra y a Patricia, nuestra wedding planer de Ritual Mallorca. Ellos nos facilitaron tantísimo las cosas, sobre todo teniendo en cuenta que nosotros residimos en Madrid y no conocíamos proveedores en las islas baleares! Andreu, premiado con una estrella Michelín, adaptó bastantes platos a nuestro gusto y vino él mismo con su equipo a cocinar en el evento. Algo que no es muy habitual y que da mucha tranquilidad y confianza. De hecho, todo estaba buenísimo!!

La verdad es que cuando pienso en ese día solo siento agradecimiento. Agradecimiento por contar con el maravilloso equipo de Angela Navarro que desde hace un año se preocuparon y encargaron de que fuera la novia más guapa. De verdad que no puedo hablar más que cosas buenas de ellas, además de su excelencia profesional, su calidad humana es increíble. Gracias Lola, Sandra, Bea y Ana. Gracias porque me hicisteis brillar como nunca, siendo yo misma.

Pero hablemos de los vestidos! Para la preboda me puse un vestido precioso de Laura Bernal en tonos blancos y negros. El vestido tenñia brocados y transparencias y respiraba un poco un “estilo niña buena” que me encantó. Lo combiné con unos zapatos de Isabel Marant de tacon midi y mi cazadora de cuero.

El día de la boda llevé dos vestidos. El primero era un diseño de Marco y María. Ya os contaré con más calma, pero yo no quería ser una novia tradicional. Buscaba algo distinto, con color, atrevido pero no vulgar. Quería algo que respirara “El sueño de una noche de verano”, algo mágico. Cuando ví los diseños de estos canarios sabía que entre su colección estaba “el vestido de novia” para mi. Y así fue. Es cierto eso de que “es el vestido quién te elige”, porque yo en un principio tenía otro en la cabeza pero fue probarme este y darme un palpito el corazón. ¿Os pasó tambien a vosotras?

En esta ocasión como el vestido ya de por si era bastante “espectacular” necesitaba complementos discretos pero que siguieran la misma linea de lo que quería. Llevo una tiara de cuarzo rosa muy bonita de Rosantica. Una marca italiana que conozco desde hace tiempo y que me gustan por sus diseños femeninos y exquisitos. Así que cuando ví esta tiara tenía claro que era el complemento perfecto para mi vestido.

Lo mismo me paso con el ramo de novia. Necesitaba algo acorde con el vestido, monocromático, femenino pero inusual. Aqui conté con la ayuda de mi super wedding planer, ella fue la directora de orquesta de todo, que me presentó a Francis García para que me hiciera el ramo. Tras una charla por teléfono y un par de emails teníamos el ramo. Sería de flor de guisante. Las fotos hablan por si solas!

Para la fiesta quería un vestido más cómodo y sencillo que me permitiera bailar y moverme comodamente por la fiesta. Pero tenía claro que quería seguir “siendo la novia”. El segundo vestido es de la marca Oui The Label. Una casa australiana que diseña vestidos y dos piezas ( como el que llevo) de corte más sencillo pero con un punto moderno que me gustaron mucho. Elegí un top con escote triangular en la espalda y una falda larga con una abertura pronunciada y sexy al lateral. Las cuñas son de Castañer.

Quiero dar las gracias a Verbena Madrid por ser parte de este inolvidable día con una verbena de ensueño para el vestido de fiesta. Esta marca es la pera. Sus diseños son increíbles y tienen todo el rollo y estilazo del mundo. Era justo lo que buscaba para darle un toque moderno y divertido a mi segundo vestido.

La ceremonia la realizamos en el mismo patio de la finca y bajo un tipi lleno de flores y alfombras boho. Toda la decoración fue obra de EnEsencia y su cabeza pensante, Helena. Una maravillosa profesional que supo a la perfección que era lo que queríamos, tanto es así que cuando los invitados pasaron al jardín principal para sentarse en las mesas, se quedaban parados con sus moviles haciendo fotos. Y la verdad es que no me extraña porque nosotros mismos estabamos alucinados de lo bonito que estaba todo! Gracias Helena, eres increíble.

Como eramos una boda pequeña optamos por distribuir a los invitados en tres mesas alargadas, con madera a la vista y llenas de velas colgantes y vasijas con flores. No faltaba ni un sólo detalle! El detalle divertido e inesperado… ¡Que nos atacaron los grillos! Sí, cosas del campo. Pero afortunadamente solo causaron unas pocas risas nerviosas y anécdotas.

Y ya por ultimo, quiero dar las gracias por estas increíbles fotos a Francisco Fonteyne y su equipo. Gracias por haber sido capaz de recoger estos maravillosos recuerdos que siempre llevaremos dentro. Eres un crack!

Os dejo con las fotos, ¡cualquier duda aqui estoy! Un besazo y feliz martes.